El hombre es el animal que construye instrumentos. Que habla, que simboliza. Sólo él ríe, sólo él sabe que va a morir, sólo él desdeña aparearse con su madre y con su hermana, sólo él imagina esos mundos en que habitar que Santanaya llamó religiones o sólo él hornea esas tartas de barro mentales que Cyrill Connolly llamó arte. No sólo tiene mentalidad sino conciencia, no únicamente necesidades, sino también valores. No sólo miedo, sino también sentido moral; no sólo un pasado, sino también una historia. Sólo él tiene cultura. (C. Geertz)